Doctrina Básica, Arrepentimiento para Salvación

¿Alguna vez se ha arrepentido de algo malo que ha hecho o de alguna decisión incorrecta? lo mas probable es que sí, pero esos arrepentimientos han sido pasajeros por los errores y fracasos que se ha tenido en la vida. Pero hay un verdadero arrepentimiento sincero y genuino que es hecho delante de Dios y que es para nuestra salvación y cambio de vida., a este tipo de arrepentimiento se refiere Marcos 1:15 "El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio"

Para llegar a ese arrepentimiento genuino que produzca cambios en nosotros debemos tener en cuenta algunos aspectos de suma importancia.

Para poder arrepentirnos de algo, debemos reconocer que algo hemos hecho mal, de igual forma el arrepentimiento es un reconocimiento del pecado, es aceptar delante de Dios que somos pecadores. 

Lucas: 18: 13 no da un ejemplo claro de lo que es acercarse a Dios sabiendo que somos pecadores y necesitamos un cambio, la oración del publicano nos muestra su actitud de humillación ante Dios por su condición y su petición de misericordia, "Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador"

Reconocer que somos pecadores nos acerca a Dios en humillación y dependencia, nos ayuda a reconocer que necesitamos de Él y sobre todo, nos ayuda a querer ser diferentes, ser mejores para Él.

El arrepentimiento produce una verdadera tristeza por haber pecado contra Dios, ese compungimiento de saber que le hemos ofendido, que hemos sido egoístas y mal agradecidos, esa tristeza que nos lleva a desear con todas nuestras fuerzas no volver a hacerlo, no volver a defraudar a aquel que ha dado todo por nosotros. También te puede interesar nuestro articulo Lo que le faltaba a Cornelio Hechos 10

El verdadero arrepentimiento causará en nosotros el dolor de haber hecho algo que desagrada a Dios, pero no solo nos causará dolor y tristeza, sino que ese dolor y tristeza debe de llevarnos a la decisión de no volver a fallar a Dios II Corintios 7:8-9 "Ahora me gozo, no porque hayáis sido contristados, sino porque fuisteis contristados para arrepentimiento; porque habéis sido contristados según Dios, para que ninguna pérdida padecieseis por nuestra parte. Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación," 

Esa tristeza según Dios por el pecado cometido nos llevará a una confesión, pues el arrepentimiento genuino es confesión de los pecados a Dios. I Juan: 1: 9-10  "Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros." 

Un arrepentimiento genuino es aquel que nos lleva hacia Dios, el reconocer nuestra condición ante Dios producirá en nosotros una tristeza, esa tristeza nos llevará a la confesión de nuestras faltas ante Dios y esa confesión producirá en nosotros el deseo de no volver a fallar a Dios, el compromiso de un cambio, el compromiso de apartarnos del pecado y acercarnos a Dios para servirle, el verdadero arrepentimiento producirá en nosotros un verdadero cambio de vida, actitudes y pensamientos. Lucas: 15: 18 "Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros". El hijo prodigo que regresa arrepentido llega al padre con una actitud sumisa, amorosa y llena de agradecimiento, llega con un corazón de siervo.