¿Que pedir en oración?

Estas son las solicitudes que en una oración ferviente hicieron los miembros de la iglesia de Jerusalén cuando vinieron las dificultades. 

Pedro y Juan habían hecho un milagro notable en el nombre de Jesús, y el Sanedrín les ordenó que no hablaran más ni enseñaran en el nombre de Jesús, pero como era de esperarse ellos se negaron a obedecer, sabiendo que esto causaría mayor persecución para la iglesia.

Los apóstoles dijeron esto a la iglesia, y los miembros se arrodillaron en oración clamando  a Dios por todo aquello que se les venia, estas son sus solicitudes. Puedes leer mas en nuestra pagina Devocionales Cristianos Cortos

“Señor, mira sus amenazas.”,  A Pedro y a Juan se les había ordenado que no hablaran ni enseñaran en el nombre de Jesús. Todos los discípulos se daban cuenta de la severidad del castigo que el Sanedrín imponía a los que desobedecían sus mandatos; pero no harían caso del sufrimiento con tal de que pudieran testificar en el nombre del Señor Jesús. 

Así es que pidieron a Dios que mirara las amenazas, y dejaron todo el asunto al juicio de Dios. Esta fue una oración a Dios pidiendo su protección, y siempre hay lugar para una oración de esta naturaleza.

La oración que ellos elevaron fue pidiendo protección para cumplir la voluntad d e Dios, ellos bien pudieron evitar el problema callando y obedeciendo al concilio, pero era menester obedecer a Dios antes que a los hombres, y si eso significaba poner su vida en peligro, entonces lo harían, pero necesitarían la protección de Dios en todo momento.

Muchos de nosotros constantemente nos enfrentamos ante esta propuesta del enemigo, no hables en su nombre, no prediques en su nombre, no busques conflictos, sigue las corrientes de este mundo, sigue enseñando lo que la mayoría enseña, etc, algunos deciden aceptar la propuesta para evitar conflictos, pero otros deciden ser vituperados y seguir firmes con su fe y sus convicciones, enseñando La sana doctrina Bíblica que hemos recibido, y es ahí donde necesitamos la protección de Dios ´para mantenernos firmes y seguros en Cristo.

“concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra” No solamente rogaron por su rescate, protección y ayuda, sino también por el privilegio de hablar más en el nombre del Señor. Estaban muy ansiosos de predicar la palabra de Dios con toda libertad, y no sabían de otro medio mejor para conseguir valor y confianza que el de la oración a Dios.

Todos tienen el privilegio de predicar el evangelio hoy día; pero no todos tienen el valor de hacerlo. Eso se consigue por la presencia del Espíritu Santo.

Es maravilloso ver la pasión de la iglesia primitiva, sus vidas corrían peligro por predicar a Jesucristo, y aun así pedían el privilegio de seguir predicando su palabra, es un ejemplo de motivación para muchos de nosotros que hoy en día tenemos la libertar de hablar de ese glorioso evangelio sin temor a ser perseguidos, apedreados, quemados o crucificados.

“Mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo” Aquí se reconoce que hay poder suficiente en Cristo para hacer cualquier milagro; también se reconoce que este poder está disponible para los cristianos sinceros que lo pidan. 

Es una promesa de Dios para el pueblo de su nombre, "Las señales nos seguirán", el mundo entero debe de ver que servimos a un Dios Poderoso que sana, libera y levanta aun incluso a los muertos.

Este poder se manifestó cuando Pedro y Juan sanaron al cojo, y testificaron que por medio de la fe el cojo fue curado. Hay otras ocasiones en que se manifestó este poder como un resultado de las oraciones fervientes.

La iglesia primitiva creció muchísimo a pesar de la persecución, ¿Sabe porque?, porque aunque Satanás los amenazara, ellos confiaban en un Dios poderoso que podía librarlos de todo mal.

Haga suya la oración que hizo la iglesia primitiva, exponga delante de Dios su causa, pida protección y poder para seguir predicando su nombre y verá como los escogidos de su nombre empiezan a multiplicarse con el favor de Dios.

Los discípulos sentían la necesidad de una protección, del privilegio de hablar de Cristo, y de tener poder en Su nombre. Rogaron por estas cosas y el Señor se las concedió, usted puede hacer lo mismo y ver la gloria de Dios en su vida.