Agar e Ismael en el desierto de Beerseba Genesis 21:15-17

Esta Reflexión de la vida de Agar e Ismael en el desierto de Beerseba nos enseña que no importa si creemos que todo esta perdido, no importa si la situación cada vez empeora mas, Dios no dejará morir ni a sus hijos ni a las promesas que ha echo.

No importa que tan solos nos sintamos, no importa cuanto tiempo sintamos que hemos andado errantes y sin rumbo, no dejes morir las promesas que Dios a puesto en tus manos. 

Quizás han habido momentos en los que te has sentido incapaz de seguir adelante, quizás estas igual que agar, estas poniendo tus sueños a un lado para dejarlos morir (Genesis 21:17 "y se fue y se sentó enfrente, a distancia de un tiro de arco; porque decía: No veré cuando el muchacho muera."), en esta hora Dios quiere decirte, "No dejes morir tu sueño"; "No renuncies a tu sueño".

Agar se había olvidado de algo, se olvidó de que Dios le había hecho una promesa a su hijo, y Dios no olvida sus promesas, así que si fue Dios quien nos dio una promesa, Él es quien la sostendrá; a pesar de nuestros miedos, Él es quien nos ha sostenido en medio de desiertos y tribulaciones y quien terminará lo que comenzó en nosotros, así que no dejes morir tus sueños (Filipenses 1:6 "El que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;"). También te puede interesar leer Elías es alimentado por cuervos en Quirit

Muchas han sido las veces que nos hemos sentido en la misma situación de Agar en el Desierto de Beerseba, solos, errantes, con miedos y atravesando un desierto de problemas.

Muchas veces hemos quedado como Agar, sin agua en el odre que le había llenado Abraham, Agar sentía que no tenia como sustentar a su hijo y por eso lo quería abandonar en un arbusto para no tener que verlo morir; los desiertos de problemas muchas veces nos secan y nos deshidratan espiritualmente, quedamos sin agua en nuestros odres y creemos que todo esta perdido, al igual que Agar, empezamos a abandonar nuestros sueños, nuestro liderazgo, dejamos de servir a Dios porque ya no hay fuerzas, hacemos a un lado nuestro llamado y olvidamos las promesas de Dios.

En el desierto de Beerseba, Agar trató de proteger al muchacho como pudo, pero el agua se acabó, ¿Has tratado de mantenerte a pesar de las muchas aflicciones que han llegado a tu vida?; ¿Has tenido que dejar de servir a Dios porque te quedaste sin fuerzas y has sentido un dolor inmenso en tu corazón?,  ¿Has puesto bajo el arbusto tus promesas porque sientes que ya no puedes mas?

Dios quiere hablarte hoy, quiere que al igual que Agar, tu también puedas abrir tus ojos y puedas ver la fuente de agua viva que tienes en frente, Jesucristo es esa fuente de agua viva inagotable, Jesucristo puede calmar tu sed, darte descanso y cumplir todas las promesas que un día recibiste.

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Cuando se acabó el agua y, habiendo perdido su camino, en ese clima cálido, Ismael fue rápidamente vencido por la fatiga y la sed, estaba mas débil que Agar, y estando en una condición fatal, "El muchacho alzó su voz y lloró" (Genesis 21:16), usted puede leer un poco mas y se dará cuenta que la reacción de Dios es instantánea "Y oyó Dios la voz del muchacho;" (Genesis 21:17); esto es exactamente lo que Dios espera de nosotros mientras atravesamos el desierto, que alcemos nuestra voz, que calmemos a Dios, que no olvidemos que tenemos un Dios grande y poderoso, Agar había olvidado esto, pero Ismael logró llamar la atención de Dios con su llanto desesperado y angustiado.

El desierto nos puede golpear, nos puede debilitar, nos puede enfermar, nos puede agobiar, muchas veces podeos sentir incluso que el desierto esta a punto de matarnos, pero Dios quiere escuchar un clamor de dependencia, Dios quiere escuchar tu voz pidiendo su ayuda, Dios esta esperando que llores pidiendo su presencia, su respaldo, su protección y su salvación, cuando lo hagas veras que Dios si escucha tu clamor, veras como envía ángeles que cuiden de ti, veras como Dios si cumple sus promesas.

Cuando Ismael lloró, Dios no habló al muchacho, Dios le habló a Agar, las palabras de Dios fueron "¿Qué tienes, Agar? No temas; porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está" (Genesis 21:17), Dios quería que Agar supiera que no estaba sola, que ella vería el cumplimiento de las promesas que Dios le había hecho, pero fue el llanto de Ismael lo que hizo que Agar tuviera esperanza.

Dios escucho a Ismael y por eso Agar tuvo la oportunidad de vivir y ver la promesa de Dios en su hijo, muchos hoy están igual que Ismael, llorando por usted, para que su sueño no muera, para que el desierto no acabe con usted, el llanto de muchos es lo que hoy hace que Dios le diga ¿Qué tienes?, No temas,  el llanto de muchos es lo que esta haciendo que usted hoy pueda leer estas líneas y encontrar las fuerzas para ponerse en pie, ver la fuente de agua, tomar su sueño y seguir adelante hasta que vea las promesas de Dios cumplirse en su vida.

Dios quiere que sostengamos lo que Él nos dio, porque hará cosas grandes. No dejemos morir sus promesas, porque de igual manera que David fue formado en el desierto, así Dios quiere formar esa promesa en nosotros en medio de situaciones difíciles. Puedes leer mas en nuestra paginas Reflexiones cristianas y sermones cristianos