CUANDO LOS BEBES MUEREN, ¿VAN AL CIELO O AL INFIERNO?
Algunas preguntas comunes
Si un bebé, infante o niño pequeño muere antes de poder conocer a Jesucristo, ¿adónde van? Todos nacemos en pecado, pero ¿pueden los bebés ir a la presencia del Señor ya que Jesucristo es la única manera de ser salvos (Hechos 4:12)? ¿Cuál dice la Biblia que es el destino de esos jóvenes que mueren antes de haber tenido la oportunidad de escuchar el evangelio?, ¿Qué pasa con aquellos con retraso mental severo?
Nacido en pecado
Todos los hombres nacen en pecado al momento de nacer (Salmo 51:5). Aunque los niños son incapaces de entender el evangelio al nacer, como cada uno de nosotros, también vienen a este mundo en un estado pecaminoso al nacer y, de hecho, incluso en el útero (Salmo 58:3). Dado que nacemos en un estado pecaminoso, ¿Qué pasa con el niño pequeño o con el bebé que muere antes de tener la oportunidad de depositar su fe en el único nombre que se nos ha dado para que podamos ser salvos (Hechos 4:12)?
En primer lugar, nadie busca realmente a Dios (Romanos 3,11). No hay una sola persona que haya vivido que sea justa o que busque a Dios por su cuenta, con la excepción de Jesucristo, que es a la vez Hombre y Dios Romanos 3, 10-12(Puedes leer mas en nuestro articulo
Jesucristo, como Hijo y como Dios).
Nuestras buenas obras no son lo suficientemente buenas para ser salvos, a pesar de la inocencia percibida de los bebés (Isaías 64:6). Los seres humanos naturalmente gravitan hacia la tendencia a pecar porque nacimos de esta manera. Heredamos la naturaleza pecaminosa del primer hombre, Adán (Romanos 5:12,16,18). Estamos obligados a estar en un estado de pecaminosidad hasta que alguien pueda ser hecho pecado por nosotros. Afortunadamente, esto sucedió a través de Cristo Jesús porque, “Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él”.(2 Corintios 5:21). Entonces, la buena noticia es que hay esperanza, pero es esperanza solo para aquellos que pueden comprender el evangelio de Jesucristo y Su obra en el Calvario. Entonces, ¿Dónde deja esto a los bebés que mueren en la infancia? ¿A dónde van?
¿Qué bebé puede saber que está en un estado pecaminoso y que está separado de Dios por sus pecados?
La era de la responsabilidad
La Biblia no especifica claramente cuál es la edad de responsabilidad. Esa edad es la edad en la que una persona puede entender claramente que es un pecador en necesidad de un Salvador y que la persona se ve a sí misma como indigna de entrar en la vida eterna. ¿Qué bebé puede saber que está en un estado pecaminoso y que está separado de Dios por sus pecados? ¿Cómo pueden saber el hecho de que deben poner su fe y confianza en Jesucristo, quien es el único que puede salvarlos? Un bebé, un infante, un niño pequeño e incluso alguien que tiene una discapacidad mental severa no pueden descubrir que han quebrantado la santa Ley de Dios y deben nacer de nuevo, regenerarse, en una nueva criatura en Cristo. ¿Cómo pueden darse cuenta de que pueden recibir el perdón hasta que sepan que lo necesitan (1 Juan 1:9)? Claramente no pueden.
En el Antiguo Testamento, cuando por la dureza de corazón de la nación de Israel, no pudieron entrar en la Tierra Prometida, Dios no hizo responsables a los hijos de este pueblo porque eran demasiado jóvenes para entender. Escuche lo que Dios dice acerca de estos niños en Deuteronomio 1:39: “Y vuestros niños, de los cuales dijisteis que servirían de botín, y vuestros hijos que no saben hoy lo bueno ni lo malo, ellos entrarán allá, y a ellos la daré, y ellos la heredarán”
En una de las más grandes profecías de Jesucristo en Isaías 7:14-16 el profeta registra esto acerca de Jesús:
“Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel. Comerá mantequilla y miel, hasta que sepa desechar lo malo y escoger lo bueno. Porque antes que el niño sepa desechar lo malo y escoger lo bueno, la tierra de los dos reyes que tú temes será abandonada.” muestra una prueba positiva de que el muchacho – de hecho cualquier niño o niña – no puede saber en una edad temprana acerca de elegir rechazar el bien o el mal. (También te puede interesar leer
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¿A DONDE VAN LOS BEBES QUE MUEREN?
Dado que vemos en las Escrituras que los niños pequeños, los bebés y los infantes no son responsables de haber nacido en pecado, ¿adónde van si mueren a una edad temprana? ¿Hay algún precedente en la Biblia donde veamos un ejemplo de alguien tan joven muriendo y dónde estarán? ¡Sí! David y Betsabé tuvieron un bebé que fue concebido en adulterio. El bebé muere pero el bebé era inocente de los pecados de sus padres, particularmente de David. ¿Qué dijo David después de que murió su bebé y el de Betsabé? David parecía saber con certeza a dónde iría el bebé porque dijo en 2 Samuel 12:23 que “Mas ahora que ha muerto, ¿para qué he de ayunar? ¿Podré yo hacerle volver? Yo voy a él, mas él no volverá a mí.”. Como el niño no podía volver a David, dijo: “Iré a él”. Como sabemos que el trono de David se establecerá para siempre en el Reino de los Cielos, David debe estar pensando en ese Reino y darse cuenta de que volverá a ver a este niño algún día.
El Salmo 132:11 dice: “En verdad juró Jehová a David, Y no se retractará de ello: De tu descendencia pondré sobre tu trono". Además, se ha profetizado que David reinará en el Reino futuro, “sino que servirán a Jehová su Dios y a David su rey, a quien yo les levantaré” (Jeremías 30:9). Aquí hay una referencia real a la resurrección del rey David y dado que resucitará, entonces "irá a él".” (el niño fallecido) en este Reino, sabemos que este bebé volverá a vivir en el Reino y no está condenado a un tormento eterno en el infierno.
Parece haber una dispensación especial de la gracia y la misericordia de Dios para aquellos que mueren jóvenes y antes de la edad de ser responsables de su salvación (una rendición de cuentas). Dado que Dios conoce incluso a los no nacidos, podemos ver que incluso los fetos abortados o los nacidos muertos también estarán en este Reino. Jeremías escribió: “antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones.” (Jeremías 1:5). David entendió esto bien como lo declaran los Salmos, “Porque tú formaste mis entrañas; Tú me hiciste en el vientre de mi madre. Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien. No fue encubierto de ti mi cuerpo, Bien que en oculto fui formado, Y entretejido en lo más profundo de la tierra. Mi embrión vieron tus ojos, Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas Que fueron luego formadas, Sin faltar una de ellas.” (Salmo 139:13-16). Aquí hay evidencia de que Dios nos ve como seres humanos antes del nacimiento, que Él nos conoce incluso cuando estamos “entretejidos” en el vientre de nuestra madre, y que incluso antes de que seamos formados (cuerpo sin forma), Él nos consideró un humano viable. Esto parece apoyar la prohibición del aborto, que es quitar la vida a una persona. Tener un aborto sería visto como un asesinato a los ojos de Dios.
¿A DONDE VAN LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD O RETRASO MENTAL SEVERO?
Creo que también hay algunos ejemplos del destino de aquellos que no pueden entender el evangelio debido a su severo retraso mental o discapacidad por causas ajenas a ellos. Alguien con un retraso mental severo puede tener la mente de un niño, incluso en la edad adulta, por lo que no se puede entender el mismo principio de ser incapaz de comprender el evangelio y darse cuenta de que actualmente están separados de Dios por su pecado. Dios, conociendo el corazón y la mente de cada uno de ellos, no esperaría que rindieran cuentas. No pueden ser responsables de algo que posiblemente no puedan entender, al igual que un bebé no podría hacerlo.
Jesús a menudo se encontró con muchos que tenían posesiones demoníacas y con aquellos que no tenían la capacidad mental para entender el evangelio debido a esta posesión. Note que, “ Y se difundió su fama por toda Siria; y le trajeron todos los que tenían dolencias, los afligidos por diversas enfermedades y tormentos, los endemoniados, lunáticos y paralíticos; y los sanó.” (Mateo 4:24).
Aquellos que tienen convulsiones o están paralizados también pueden ser aquellos que están bajo coacción debido a retraso mental o discapacidad. Cuando Jesús los sanó, parecían capaces de entender quién era Jesús y cuál era su estado en Lucas capítulo 8. ¿Qué hizo el hombre que hizo que Jesús exorcizara el demonio de él? “Y el hombre de quien habían salido los demonios le rogaba que le dejase estar con él; pero Jesús le despidió, diciendo: Vuélvete a tu casa, y cuenta cuán grandes cosas ha hecho Dios contigo. Y él se fue, publicando por toda la ciudad cuán grandes cosas había hecho Jesús con él.”. (Lucas 8:38-39). Aparentemente, este hombre ahora se convirtió en un testigo de Jesucristo y contó por toda la ciudad cuánto había hecho Jesús por él.
Podemos ver que los que mueren en la infancia, los que nacen muertos, los que han sido abortados, los niños pequeños, los bebés y los niños pequeños que mueren antes de la edad de responsabilidad no son condenados sino que estarán en el Reino. No serán juzgados como culpables y condenados.
David entendió que cuando él y Betsabé perdieran a su bebé, el bebé no podría venir a ellos pero él iría a él. Ese día probablemente ya ha ocurrido ya que David está ahora con el Señor y reinará con Cristo. David ha vuelto a ver al niño. David fue a él. Fue a él porque no podía volver a David en la tierra. ¿No es eso como un Dios amoroso? Un Dios amoroso que desea que vosotros también podáis venir a Él
"En tiempo aceptable te he oído, Y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación." 2 Corintio 6:2. (Te puede interesar leer nuestro articulo
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