Satanás desea zarandearte
Satanás os ha pedido para zarandearos, estudio Bíblico
El sermón del trigo trata un tema poderoso, por eso quiero compartir un proceso por el que pasan los creyentes. Es algo ordenado por Dios y siendo así es una buena cosa.
A medida que observamos este proceso de zarandeo en el que todos estamos, puede que se sienta un poco incómodo. Pero si ves el resultado final del proceso, verás que realmente es lo mejor para ti.
El diablo os ha pedido para zarandearos, pero ¿Qué significa Zarandear?
En la Biblia, “zarandear” se refiere típicamente al proceso de separar el trigo de su contraparte no comestible, es decir la cascarilla.
En los días de Jesús, la cosecha de trigo requería mucho tiempo y esfuerzo. Primero, los agricultores segaban el trigo y lo recogían. Luego lo golpeaban contra una superficie dura o usaban un trillo tirado por animales a fin de triturar la espiga y así separar la paja y el grano. A continuación aventaban el trigo para que el viento se llevara la paja. Por último, zarandeaban el grano en una criba para eliminar toda materia extraña.
Ahora, ¿Puedes imaginar el proceso en lo espiritual? Proceso por el que todos debemos pasar para poder ser llamados trigo, no es fácil, no es grato, pero trae la gran recompensa de llevarnos a los graneros celestiales del Rey de reyes.
Llegamos a ser llamados trigo si alcanzamos el nivel de madurez que Dios pretende por medio del zarandeo. Déjame poner un pequeño fundamento bíblico. Los siguientes versículos hablan muy bien de un proceso espiritual iniciado por Dios para permitirte llegar a la madurez.
Quiero que noten el resultado final, las pruebas a veces llegan a nuestra vida y nos hacen crecer. Por eso Santiago dijo en Santiago 1:2-3 “Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna”. Note en este versículo que la madurez es el resultado final que Dios está buscando. Dios quiere que te conviertas en un creyente maduro.
Y también Pedro habla de esta madurez porque dice en 1 Pedro 1:6-7 “En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas,
1Pe 1:7 "para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo”. Los valores de Dios no son nuestros valores. Pedro tuvo que aprender eso al ser zarandeado. Él dice aquí que la prueba de su fe es más importante que el oro y la plata.
Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo.
El diablo os ha pedido
El sermón suena extraño pero es muy bíblico. Lucas 22:31-34 “dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos.”
Creo que los creyentes pasan por varias etapas en su vida espiritual. Quiero llamar a estas etapas etapas de crecimiento.
Zarandearos como a trigo, etapa de preparación
Habíamos dicho que en tiempos de Jesús primero, segaban el trigo y lo recogían, Nuestro Dios esta recogiendo la cosecha, los campos están blancos y listos para la siega, es ahí donde somos llamados y escogidos para un servicio celestial, Dios nos saca del lodo para hacernos instrumentos útiles para su obra, el nuevo creyente está en la Palabra, está en oración, está en ayuno, Dios comienza a hacer una obra en su vida. Los está preparando para algo grande.
Al igual que el trigo, eres arrancado de este mundo, eres recogido por Dios para propósitos grandes, el gran problema es que en esa recolección también viene paja, basura, piedras, etc., y es ahora donde empieza el verdadero proceso.
Zarandearos como a trigo, etapa de separación
Esta etapa es la que consiste en separar el trigo de la paja, ¿Cómo se logra?, se tomaba la espiga y la golpeaban contra una superficie dura o usaban un trillo tirado por animales a fin de triturar la espiga y así separar la paja y el grano, imagínate por un instante ser triturado, golpeado con violencia o tirado con fuerza contra una superficie dura, a fin de sacar lo valioso que hay en ti.
En esto consiste la etapa de separación, somos golpeados por diversas circunstancias que muchas veces son dolorosas de soportar, la aflicción a veces parece que nos tritura por dentro, son procesos difíciles como la muerte de un ser querido, un despido del trabajo que nos da el sustento, un matrimonio roto, hijos que se vuelven rebeldes, problemas laborales o familiares, enfermedades, etc.
El proceso de separación es doloroso pero necesario, la paja debe salir, la basura debe salir y solo el que verdaderamente es trigo se queda, esa es la razón por la que muchos en el momento de bendición son fieles, alaban a Dios y viven dando gracias por todo, pero cuando las cosas empiezan a ponerse difíciles abandonan su fe, se olvidan del Dios que les dio salvación y luego no les vemos mas en las iglesias. El proceso saco a luz lo que realmente eran, lo mismo paso con Israel en el desierto, Dios los paso por ahí para probarlos y para saber lo que había en el corazón de ellos, el desierto los hizo renegar contra Dios, volverse a dioses falsos, olvidar el pacto con su Dios (Deuteronomio 8:2-4). ahora te pregunto ¿Qué ha salido de tu corazón durante el proceso de separación?, ¿Has renegado o has dado gracias?, ¿Has claudicado o has continuado viendo a ese blanco perfecto?, ¿Has olvidado sus promesas o continuas aferrado a tu fe?
¡Quiero que veas el panorama general hoy! Los valores de Dios no son tus valores. Sus caminos son mucho más altos que tus caminos. La prueba de su fe es más importante para Dios que tu comodidad. Lo que Él piensa que es importante puede no ser necesariamente lo que tú piensas que es importante. Las pruebas y los desafíos de la vida nos permiten crecer hasta la madurez eliminando la paja no deseada de nuestros corazones, es como ser arrojados al viento para que este se lleve lo que no es necesario.
Zarandearos como a trigo, etapa de Zarandeo
Dios ve dentro de nosotros algunas cosas que necesitan cambiar, por eso nos somete al proceso de separación. Lo he dicho muchas veces: Dios te acepta como eres, pero te ama tanto que no puede dejarte como eres. Él te desafiará a crecer y cambiar.
Zarandearos como a trigo, es mover una cosa de un lado a otro con rapidez y energía, sacudirte fuertemente con el propósito de seleccionar el trigo y sacar la basura.
Dios nos permite pasar por por el proceso de zarandeo para que las cosas en nuestras vidas que necesitan cambiar, sean removidas, que puedan ser procesadas. Es un tiempo de crecimiento. Es un momento en que su fe es desafiada. Es un momento en que suceden cosas en tu vida sobre las que no tienes control. Tienes que confiar en Dios. Parece que estás bajo ataque satánico. Es un período de tu vida en el que necesitas mucha oración. Te pararás o caerás. La buena noticia es que esta etapa no durará para siempre. Esta es una temporada.
Luego del zarandeo de repente, te das cuenta de que Dios te ha hecho crecer. Miras hacia atrás a las cosas que alguna vez fueron un problema y ya no son un problema. Eres maduro. Muchas personas predican sobre la preparación, la bendición e incluso la madurez. Pero no se predican muchos sermones acerca de ser zarandeados, golpeados violentamente o triturados, este proceso es el que verdaderamente nos ayuda a alcanzar la madurez que Dios espera.
Durante el zarandeo debes recordarte a ti mismo que Dios lo usará para cambiarte, moldearte, cincelarte, transformarte, corregirte, desafiarte, para hacerte crecer, repítelo constantemente y cree que Dios usara todo este proceso para tu bien, pasarás por este proceso una y otra vez hasta que salgas al otro lado como oro puro.. También puedes leer nuestro artículo
A los que aman a Dios todas las cosas les ayudan a bien
Satanás, el diablo, os ha pedido para zarandearos
El momento de este versículo en Lucas 22 es que Jesús está a punto de ir a la cruz. Y porque sabía que esto sería difícil, Jesús comenzó a advertir a Pedro. “Simón, Simón, Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo”. Creo que podemos ver la compasión y el amor que nuestro Señor tenía por Pedro. Esa advertencia no llegó bruscamente. No vino en forma de reprensión como lo había hecho antes. Pero comenzó muy suavemente a su manera, recordándole a Pedro su propia debilidad. Jesús comenzó diciendo suavemente su nombre.
Todos los que leemos este artículo tenemos debilidades. Todos nosotros tenemos áreas en nuestras vidas que necesitan ser mejoradas. Dios nos va a probar para ver si resistimos. Entonces, cuando Jesús dijo, Simón, Simón, Pedro sabía que tenía el potencial de ser tan voluble como la brisa. Entonces Jesús continuó con la advertencia. Él dijo: Satanás ha pedido zarandearos como a trigo. Aquí hay otra realidad. Satanás tiene que pedir permiso para zarandearte.
Esta es quizás una de las cosas más reconfortantes que jamás se haya escrito en las Escrituras. Básicamente, esto está diciendo: “Los que pertenecen a Jesucristo están bajo su protección”. Te estoy diciendo que Satanás no puede Reinar en tu vida. Jesús es quien si puede Reinar en tu vida. Dios está en control. Satanás tiene que ir y pedir permiso antes de poder ponerte a prueba.
Vemos que sucede lo mismo en el libro de Job. Satanás viene a la presencia de Dios y dice: Dios, Job solo te sirve porque lo estás protegiendo. Hay un seto a su alrededor. No puedo llegar a él. Lo has bendecido con riquezas. ¿Puedo tener permiso para quitarle su riqueza? Luego tuvo que volver de nuevo y pedir permiso de nuevo. ¿Puedo enfermar a Job en su cuerpo físico?
Dios no solo permite que Satanás nos pruebe y nos ataque, cada vez que tenga la necesidad de hacerlo. Solo con permiso de Dios. Somos hijos de Dios. Dios amaba a Job. Jesús amaba a Pedro como tú y yo amamos a nuestros hijos. Dios no le daría permiso a Satanás para evaluar a sus hijos más allá de lo que pueden manejar. Por ejemplo, si vinieras a mí cuando mi hijo tenía siete años y me dijeras, lo voy a poner a prueba. Voy a dejar que salga por la autopista Katy y voy a ver qué tan bien puede conducir. Yo diría, ¡no vas a evaluar a mi hijo de esa manera! ¿Por qué? ¡Él no está listo!
¡Es necesario probar en la vida! Nuestros niños se examinan en la escuela. ¿Por qué? ¿Es porque los profesores son malos? ¡No! Es para que puedan ver por su propia calificación que están progresando. Pero si el maestro le da a su hijo de primer grado una prueba de Cálculo y luego se ríe de él porque no lo entendió. Tendrías derecho a estar molesto.
Aun así, Dios no le va a dar permiso al diablo para probarnos si ÉL NO PIENSA QUE ESTAMOS PREPARADOS PARA ELLO. Si viniste a la Iglesia hoy y dijiste: “Vaya, Satanás realmente me está peleando esta semana. Hombre, me siento bajo ataque”. Podría ser cierto. Pero deberías verlo de esta manera: deberías estar diciendo esto: “Dios piensa que soy lo suficientemente fuerte para pasar esta prueba, Dios esta permitiendo a Satanás que venga contra mi porque sabe la capacidad que tengo para estar en pie y salir adelante."
Jesús sabía que pronto se iría. Estaba a punto de ir a la cruz. Y Su meta en el desarrollo de ellos era que se mantuvieran firmes. Escúchame, los discípulos nunca habrían podido resistir toda la persecución, la oposición, las pruebas que enfrentaron, incluido el martirio, si no hubieran aprendido a resistir. Jesús estaba a punto de ir a la cruz. Los discípulos no entendían por qué. Habrían elegido que Jesús se quedara con ellos y estableciera un reino terrenal. Pero los valores de Dios eran diferentes. La misión de Jesús en la tierra en ese momento era morir.
Lo que debemos entender cuando Satanás os ha pedido para zarandearos
Jesús entiende nuestras debilidades.
No importa lo que llegue a tu vida, relacional, económica, socialmente, con tus hijos, con tu mamá y tu papá, debes reconocer que todo es una prueba. Satanás está diciendo que no puedes manejar esto. Dios dice, creo en ti y te llevaré a un nivel superior.
¡Dios es increíble en su capacidad de creer en nosotros! Tenemos un Padre Celestial que es todo sabio y omnisciente y que nos ama con un amor eterno. Él nunca permitiría que nada se interponga en mi camino que no pueda manejar o con lo que no pueda lidiar.
Cuando tomas esa actitud. Es fácil decir: “Estimo como sumo gozo cuando las pruebas se me presentan, ¡porque sé que están produciendo en mí una madurez!”
Lo más triste del mundo es cuando un padre es tan sobreprotector con su hijo que no lo deja salir al mundo real. Hace unos años descubrieron a unos niños que habían sido encerrados en una casa durante años, estaban tan atrasados socialmente que ni siquiera podían hablar. Su madurez se ha atrofiado de por vida porque sus padres mantuvieron un cerco a su alrededor. Dios no te hará eso. ¡Él quiere que seamos maduros!
Jesús esta pendiente de nosotros
Jesús le dijo a Pedro: “ He rogado por ti, Simón, para que tu fe no falle”. ¿Ves? en todo lo que pasas, Satanás tiene un objetivo y Dios tiene otro objetivo. El objetivo de Satanás es que tu fe falle, que seas destruido. El objetivo de Dios es que te mantengas fuerte
La meta de Dios es que usted pueda llegar a ser fuerte en Él.
Sé que en muchas de las pruebas de mi propia vida, Dios ha permitido que incluso los ataques de los enemigos me purifiquen y eliminen lo que no era agradable. ¿Alguna vez has venido de ser zarandeado? ¡Déjame decirte que no es divertido! Solo hay una cosa que realmente ayuda a alguien durante el proceso de zarandeo y es la oración. Debemos orar unos por otros tal como Jesús oró por nosotros. A una persona le ayuda más orar por ella que ir y hablar con ella.
Muchas veces pasamos por algo y decimos, ¿por qué? ¿Por qué de todas las personas de mi círculo de amigos tengo que ser yo quien pase por esto? Y vas por el camino de la vida y de repente se hace evidente. Todos los que conoces están en el valle por el que acabas de pasar.
Dios sigue llevándolos a tu vida. Y así como las palabras fluyen de tu corazón impartiendo fuerza, esperanza y alegría a ese amigo herido, miras hacia atrás por encima del hombro y dices: He sido zarandeado para fortalecer a otros.
Satanás desea zarandearos como trigo para destruirte, Dios quiere sacar lo mejor que hay en ti por medio de ese zarandeo. Puedes leer mas en nuestra pagina
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