MANDAMIENTO CON PROMESA, REFLEXIÓN
Efesio 6:2-3: "Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra."
Mandamiento con promesa, Efesios 6:2-3
Muchas veces nuestras sociedades asocian el bienestar, prosperidad y la longevidad con categorías éticas, económicas y sociales,
"la posición determina tu éxito según esta sociedad"; sin embargo, nuestro texto (Mandamiento con promesa, Efesios 6:2-3) nos recuerda que aquello que todos deseamos y nos esforzamos por alcanzar, no es resultado de nuestra astucia, inteligencia, “buena suerte”, conexiones sociales o políticas o nuestra buena posición económica.
"Lo que más deseamos en la vida nos viene como bendición de Dios por obedecer y honrar a nuestros padres."
(También te puede interesar:
Heridas del alma)
Muchos de nuestros jóvenes trabajan incansablemente para poder alcanzar ese éxito anhelado, y no se han dado cuenta que la palabra de Dios nos trae la clave para alcanzarlo todo en la voluntad perfecta de Dios, la clave es este mandamiento con promesa.
MANDAMIENTO CON PROMESA: HONRA A TU PADRE Y A TU MADRE
El mandamiento con promesa, una bendición
Este mandamiento con promesa, es el que trae la promesa de bendición en nuestras vidas; y la Palabra de Dios es clara, no se trata de honrar a uno sí y al otro no porque no se lo merece, Dios nos manda a honrar a Padre y Madre, un mandato sin condiciones (no solo si ha sido un buen padre o madre) pero con grandes promesas de bendición. Pero, ¿En que consiste honrar a nuestros padres?
Mandamiento con promesa, honrar:
“Honrar” en este contexto se entiende en términos de obediencia.
Es la obediencia que surge del respeto y amor hacia un padre, e incluye el sostén económico y cuidado amoroso hacia los progenitores.
Sin importad la edad que tengas o cual sea la conducta de tus padres, debes honrarlos, pero honrar a nuestros padres va mas allá de la obediencia... y este es un mandamiento con promesa.
1. Valorarlos:
Debemos vivir agradecidos por todo lo que han hecho por nosotros y demostramos que los valoramos teniendo en cuenta sus consejos, escucharlos y no hacer a un lado sus palabras.
Cuando los valoramos realmente nos sentimos orgullos de ellos.
Muchos Jóvenes hoy en día se afrentan de sus padres solo porque quizás no tienen una buena educación o por lo deteriorados que están en comparación a los padres de otros de sus amigos (Apariencia física), se olvidan que gracias a que ellos se privaron de estudios, de descanso, de lujos y de muchas cosas, para que hoy en día esos muchachos puedan tener lo que hoy tienen, se les olvida que el deterioro físico de sus padres es quizás por las largas jornadas de trabajo que ellos tuvieron que pasar para poder darles un mejor futuro a esos hijos que hoy se afrentan de ellos.
Querido Joven, valora lo que tus padres han hecho por ti, no esperes a que ellos ya no estén en este mundo para reconocer todos los sacrificios que han hecho para que hoy puedas estar donde estas y tener todo lo que tienes. Prov 17:6 "... Y la honra de los hijos sus padres", recuerda, honrar a tus padres es un mandamiento con promesa de bendición para ti.
2. Aceptar su autoridad:
El gran deber de los hijos es obedecer a sus padres y respetar la autoridad delegada por Dios en ellos (Col 3:20). La obediencia comprende la reverencia interna y los actos externos (respeto), no una obediencia de apariencia sino una real que se refleje nos solo en lo que decimos sino en lo que hacemos.
En toda época la prosperidad ha acompañado a los que se distinguen por obedecer a sus padres; honras a tus padres al respetar la autoridad que Dios les ha dado y haciendo esto recibes ese hermoso mandamiento con promesa.
3. Tratarlos con respeto
Por lo general, el respeto se ve en lo que decimos y en cómo lo decimos. Es verdad que, en ocasiones, algunos padres no se comportan como es debido, y quizás a sus hijos les cueste respetarlos. Aun en esas circunstancias, los hijos pueden mostrarles honra si evitan hablarles o tratarlos irrespetuosamente (Lev 19:3; Proverbios 30:1,17). La Biblia dice que si alguien habla con falta de respeto de su padre o de su madre está cometiendo una ofensa grave (Mateo 15:4), a veces no es fácil pero recuerda que esto es un mandamiento con promesa.
4. Cuidar de ellos.
Al envejecer, es cuando puede que los padres mas necesiten nuestra ayuda y los honramos al asegurarnos de hacer todo lo posible para que tengan lo que les haga falta (1 Timoteo 5:4,8). Por ejemplo, justo antes de morir, Jesús se encargó de que alguien cuidara de su madre (Juan 19:25-27), al igual que nosotros necesitamos mas de nuestros padres al inicio de nuestras vidas, ellos necesitan de nosotros en el ocaso de sus vidas, lo han dejado todo en el camino y ahora nos corresponde a nosotros honrarlos cuidando de sus necesidades tanto económicas como emocionales, hasta el final debemos cumplir este hermoso mandamiento con promesa.
No basta una cuota mensual que asegure el pago de sus gastos, ellos necesitan también de nuestro tiempo, nuestras atenciones y sobre todo necesitan saber que son importantes en nuestras vidas.
MANDAMIENTO CON PROMESA: CONCEPTOS ERRÓNEOS SOBRE HONRRAR A TUS PADRES
Honrar a nuestros padres, un mandamiento con promesa
Honrar a nuestros padres incluye valorarlos, obedecerlos, respetarlos y cuidar de ellos; esto no implica que nuestros padres van a tener el control absoluto de nuestras decisiones; por ejemplo:
- Tus padres no pueden controlar la forma en que llevaras tu matrimonio (Cuando te unes a tu esposo o esposa ya son una sola carne, una familia independiente) tus padres siguen mereciendo respeto pero las decisiones se toman teniendo en cuenta la opinión de tu pareja y no la de tus padres, puedes escuchar su consejo pero ellos no pueden controlar las decisiones. (Gen 2:24; Mateo 19:4-5; Prov. 23:22)
- No estas atado a seguir las mismas creencias religiosas de tus padres para honrarlos; la palabra de Dios nos anima a todos a probar si lo que nos han enseñado es la verdad, la Biblia menciona a grandes hombres y mujeres de Dios que no siguieron la religión de sus padres (Pablo, Abraham, Rut), es nuestro deber estudiar las escrituras pues son ellas quienes nos revelaran el plan de salvación que Dios tiene para cada uno de nosotros.
PRIMER MANDAMIENTO CON PROMESA
Honrar a nuestros padres, el primer mandamiento con promesa
El comentario que Pablo hace del mandamiento es interesante: es el primer mandamiento con promesa. Una manera de entender la palabra primer es simplemente en cuanto a secuencia. Y eso es cierto; de los 10 mandamientos es el primero que añade, a manera de estímulo y motivación, una promesa. Pero también la palabra primer puede tener la idea de “el más importante” o el más significativo en lo que respecta a los hijos. Así lo consideraban los rabinos. Y en realidad, es la base del orden en la sociedad.
En este pasaje hay una bendición única que se promete para los obedientes, por eso es importante recalcar que cuando un hijo se casa, cambia su relación hacia sus padres (Efe 5:31), pero no su responsabilidad de proveer para ellos (1Ti 5:4).
Para que te valla bien y seas de larga vida (Mandamiento con promesa)
Consideremos la promesa, para que te vaya bien y seas de larga vida sobre la tierra. Es un mandamiento con promesa para la vida; Dios nos promete una vida buena y larga; una existencia enriquecida con su bendición de manera que nuestra vida presente sea próspera (la calidad) y extensa (la cantidad).
La bendición expresada con las palabras que te vaya bien en el contexto bíblico incluye todas las áreas de la vida (Deut. 28:1-68): la familia, el trabajo, la armonía social e internacional; en pocas palabras, experimentar el shalom, en todas las relaciones y actividades de la vida cotidiana. Y es una promesa no para la vida venidera o la vida después de la muerte sino para aquí y ahora, sobre la tierra.
El texto original del Éxodo o Deuteronomio, la expresión incluye el enunciado que el Señor tu Dios te dá, lo cual es una alusión a la tierra de Canaán. Sin embargo, en este pasaje el apóstol la evita y así le da al texto un sentido más amplio, universal. En algunos idiomas es posible que no sea necesario traducir esta cláusula ya que queda implícita. Por ejemplo, si traducimos “para que tu vida sea larga y prospera” queda implícita la idea de que eso sucede aquí “en la tierra.”
Lo que más deseamos en la vida nos viene como bendición de Dios por obedecer y honrar a nuestros padres; la chica o chico cristiano, que honra a sus padres, podrá recibir dos bendiciones: Le irá bien, y vivirá largamente en esta tierra, en esto consiste este mandamiento con promesa.
Mandamiento con promesa, conclusión:
Joven no te afanes luchando por alcanzar el éxito, honra a Dios y a tus padres y verás grandes bendiciones, recuerda la bendición no solo se mide por que tipo de carro tienes, o cuantas propiedades has adquirido, o por el tipo de ropa que usas; la bendición de Dios no es solo material; puedes tener una familia estable y eso es una bendición, puedes tener un pequeño negocio al que no le fallan los clientes y eso es bendición, puedes tener salud, puedes tener la gracia de Dios que donde quiera que llegas eres bien recibido, etc.
Dios recompensa los detalles de cuidados que tienes hacia tus padres, Dios quiere que cuides de aquellos que un día cuidaron de tí, porque por medio de nosotros como hijos Dios cuida de nuestros padres.
Valora, respeta, obedece y cuida de tus padres, pero sobre todo ámalos, déjales saber cuan importantes son para tí ahora que los tienes, ahora que ellos pueden ver con orgullo en lo que te has convertido, recibe ese mandamiento con promesas para tu vida.