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Natán amonesta a David 2 Samuel 12


NATÁN ES ENVIADO A DAVID


2 Samuel 12:1 "Jehová envió a Natán a David; y viniendo a él, le dijo...." 
El pecado de David desagradó a Jehová pero David no escuchó la convicción del Espíritu Santo ni a su conciencia. Ahora Dios envió a alguien más para hablar con David. Dios misericordiosamente siguió hablándole a David incluso cuando David no escuchó. De igual forma Dios habla a  nuestras vidas por medio del su profeta (Pastor, lideres) cuando producto de nuestro pecado no queremos escuchar la voz de Dios ni la de nuestra conciencia.

Sin embargo, nadie debe suponer que Dios hablará para siempre al pecador impenitente. Dios dijo en Génesis 6:3: “No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre”. Cuando escuchamos o sentimos la convicción del Espíritu Santo, debemos responder a ella de inmediato, porque es posible que no siempre esté allí.

La parábola de Natán (2 Samuel 12: 1-4)


Natán el profeta usó una parábola para guiar a David a condenar sus propias acciones y producir arrepentimiento "... Había dos hombres en una ciudad, el uno rico, y el otro pobre. El rico tenía numerosas ovejas y vacas;  pero el pobre no tenía más que una sola corderita, que él había comprado y criado, y que había crecido con él y con sus hijos juntamente, comiendo de su bocado y bebiendo de su vaso, y durmiendo en su seno; y la tenía como a una hija. Y vino uno de camino al hombre rico; y éste no quiso tomar de sus ovejas y de sus vacas, para guisar para el caminante que había venido a él, sino que tomó la oveja de aquel hombre pobre, y la preparó para aquel que había venido a él” Dios no tolera que su pueblo se quede tranquilo en el pecado. Con esta parábola, Natán le sacó a David una sentencia contra sí mismo. Por esta razón hay enorme necesidad de prudencia al reprender.

1. Había dos hombres en una ciudad: 
Con sabiduría y coraje, Natán usó una historia para transmitir el mensaje a David. Era común en esos días tener un cordero como mascota, y Natán usó esta historia del cordero mascota para hablar con su amigo David.

Anteriormente el profeta Natán había entregado un mensaje de gran bendición a David (2 Samuel 7), David sabía que Nathan no era un crítico negativo sino un amigo; con sabiduría de Dios el profeta hizo a David receptivo al mensaje de la historia que le contaba.

2. El que rehusó tomar de su propio rebaño... tomó el cordero del pobre: ​​
El pecado que Natán describe es el robo. Hay un sentido en el que David robó algo de Urías. La Biblia dice que en el matrimonio el marido tiene autoridad sobre el cuerpo de su mujer (1 Corintios 7:3-5) y viceversa. Obviamente, David no tenía esta autoridad sobre el cuerpo de Betsabé y él robó a Urías su esposa. El adulterio y la inmoralidad sexual son pecados en muchos sentidos, y en otros aspectos son robos, tomar algo que no nos pertenece. (También te puede interesar leer ¿Cuál es la diferencia entre fornicación y adulterio?)

Este principio también es cierto con respecto a la pornografía y la lujuria. Levítico 18 describe el pecado de descubrir la desnudez de aquellos que no son nuestro cónyuge. La idea es que la desnudez de los demás no nos pertenece, y es un robo si la tomamos.

David condena al hombre cruel de la historia de Natán (2 Samuel 12:5)


"Entonces se encendió el furor de David en gran manera contra aquel hombre, y dijo a Natán: Vive Jehová, que el que tal hizo es digno de muerte."

La ira de David se encendió mucho: 
Natán NO le pidió a David una decisión judicial, simplemente contaba una historia, pero David naturalmente asumió que la historia era cierta. David inmediatamente dictó sentencia sobre el culpable de la historia de Nathan, con esto mostró que a menudo tratamos de librarnos de nuestra conciencia culpable juzgando a otra persona, es fácil ver las faltas de otros, pero que difícil es ver nuestros propios errores, nuestras propias faltas, nuestro propio pecado.

El hombre que esto hizo, es digno de m: 
El sentido de justa indignación de David estaba tan afectado por su propia culpa que ordenó una sentencia de muerte por el caso hipotético presentado por Natán, aunque no era un crimen capital, somos duros y crueles condenando a otros por sus faltas y sus pecados, dañamos y matamos espiritualmente a otros cuando por desgracia pecan contra Dios, olvidamos que podríamos ser nosotros, olvidamos que Dios es misericordioso.

Pero cuando la situación es al revés y somos nosotros los que hemos fallado, esperamos misericordia y perdón de Dios, así que eso mismo debemos mostrar nosotros a los que han fallado. No mostrar una doble moral sino mostrar lo que Dios nos ha enseñado.

David tuvo que condenar su propio pecado antes de poder encontrar el perdón


A menudo tratamos de encontrar refugio en excusar o minimizar o desviar la culpa de nuestro pecado; simplemente no condenamos el pecado en nosotros mismos, no queremos asumir la responsabilidad de nuestras acciones.

David usó el juramento “Vive Jehová” muestra cuán apasionada era su indignación, tanto que llamó a Dios para que fuera testigo de la justicia de su sentencia de muerte sobre el hipotético hombre rico de la historia de Natán.

Por el cordero pagará el cuádruple: 


David correctamente sabía que castigar al hombre rico, incluso con la muerte; no era suficiente. También tenia que devolverle algo al hombre del que tomó algo. David sabía que el verdadero arrepentimiento significa restitución, no solo se trata de asumir su culpa, de reconocer el pecado; sino también de restituir, de dar frutos dignos de arrepentimiento.

Restaurar cuatro veces también muestra que el pecado y la dureza de corazón de David no disminuyeron su conocimiento de la Biblia. Inmediatamente supo lo que dice la Biblia acerca de los que hurtan ovejas: "Cuando alguno hurtare buey u oveja, y lo degollare o vendiere, por aquel buey pagará cinco bueyes, y por aquella oveja cuatro ovejas." (Éxodo 22:1). David conocía las palabras de la Biblia pero estaba distante del Autor, eso es lo que hace el pecado, nos aleja de Dios. Podemos conocer su palabra, podemos haber tenido gran intimidad con Dios; pero el pecado pone una pared invisible entre Dios y nosotros.

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¿Por qué David no tuvo piedad? 


Para David era increíble la idea de que alguien que lo tenia todo, fue y quito a otro lo único que tenia. La idea es que el hombre debería haber tenido piedad de su prójimo y no la tuvo fue lo que hizo que para David no hubiera justificación para la maldad de ese hombre. David no mostró compasión por un hombre que no la tuvo con su  prójimo; pero de la misma manera, David debió tener piedad del padre y abuelo de Urías y Betsabé.

LA CONFRONTACION DE NATÁN


"Entonces dijo Natán a David: Tú eres aquel hombre. Así ha dicho Jehová, Dios de Israel: Yo te ungí por rey sobre Israel, y te libré de la mano de Saúl, y te di la casa de tu señor, y las mujeres de tu señor en tu seno; además te di la casa de Israel y de Judá; y si esto fuera poco, te habría añadido mucho más.  ¿Por qué, pues, tuviste en poco la palabra de Jehová, haciendo lo malo delante de sus ojos? A Urías heteo heriste a espada, y tomaste por mujer a su mujer, y a él lo mataste con la espada de los hijos de Amón” 2 Samuel 12: 7-9

Tú eres aquel hombre


Dios muestra cuánto odia el pecado, aun en su propio pueblo; y que donde lo halle, no lo dejará sin castigo. Con estas palabras, Nathan aplicó la parábola a David con una sencillez alarmante. Nathan tuvo que sorprender a David para que viera su pecado por lo que era. "Este fue un trato francamente sencillo, una trampa para que David reconociera la gravedad de sus actos"

Conmocionado, pero no asustado:


Dios nos acusa y nos condena uno por uno para salvarnos uno por uno”. (Maclaren) Una salvación personal requiere una convicción personal de pecado. No fue suficiente que David confesara que era un pecador en un sentido general; tuvo que confesar su pecado en este mismo punto.

En este sentido, la confesión de nuestro pecado necesita ser específica. J. Edwin Orr habla de una época de avivamiento en Brasil cuando una señora se paró en una iglesia llena de gente y dijo: “Por favor, oren por mí. Necesito amar más a la gente”. El líder le dijo amablemente: “Eso no es una confesión, hermana. Cualquiera podría haberlo dicho”. Más tarde en el servicio, la mujer se puso de pie nuevamente y dijo: “Por favor, oren por mí. Lo que debería haber dicho es que mi lengua ha causado muchos problemas en esta iglesia”. Su pastor le susurró al líder: “Ahora ella si está hablando”.

No cuesta nada decir: “No soy todo lo que debería ser” o “Debería ser un mejor cristiano”. Cuesta algo decir: “He sido un alborotador en esta iglesia” o “He tenido amargura hacia ciertos líderes, a quienes les pido disculpas en este momento”. Nos cuesta reconocer nuestra condición ante Dios y mucho mas ante los hombres (Pastor) pero la Biblia es clara cuando dice "El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia" Proverbios 28:13

David aplico la palabra de Dios a su vida  y el Salmo 51:1-19 registra las palabras de arrepentimiento de David cuando fue confrontado por Natán acerca de su pecado con Betsabé y el Salmo 32:1-11, David expresa su aflicción después de que Natán se enfrentase con él, David expresa palabras como "Mientras callé, se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día." ese era el estado en el que se encontraba, mas adelante en este mismo Salmo David expresa palabras de liberación "Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado."

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Yo te ungí, te  libré, te di todo y te hubiera dado mucho más


A través de Natán, Dios le explicó a David que su pecado era realmente una expresión baja de ingratitud . Cuando Dios le dio todo esto a David y tenía mucho más para darle, David buscó el pecado en su lugar, ¿a cuantos de nosotros no a pasado lo mimo?

¿Por qué, pues, tuviste en poco la palabra de Jehová, haciendo lo malo delante de sus ojos? 
En el Salmo 19:8 , David dijo: "El mandamiento de Jehová es puro, que alumbra los ojos"  Sin embargo, por su pecado, menospreció el mandamiento del SEÑOR . David actuó como si el mandato de Dios fuera incorrecto y despreciable cuando hizo lo malo ante sus ojos.

Has matado a Urías y has tomado a su mujer: 
Esta es otra forma de decir: “ ¡Tú eres el hombre! Dios no permitirá que David culpe a nadie ni a nada más, David tenia que asumir su responsabilidad y cargar con las consecuencias de su pecado.

EL CASTIGO DE DAVID


“Por lo cual ahora no se apartará jamás de tu casa la espada, por cuanto me menospreciaste, y tomaste la mujer de Urías heteo para que fuese tu mujer.” 2 Samuel 12:10

Dios prometió que desde ese día en adelante David conocería la violencia y el derramamiento de sangre entre los miembros de su propia familia.

Cuando David exigió una restitución cuádruple para el hombre de la parábola de Natán, Dios exigió una restitución cuádruple para Urías de cuatro de los hijos de David: el hijo de Betsabé, Amnón, Absalón y Adonías.

En 2 Samuel 12:9 Dios dijo a David "Por cuanto me menospreciaste," he aquí la consecuencia de menospreciar el mandamiento de Jehová , Nathan explicó que al hacer esto, David despreció a Dios mismo. No podemos despreciar los mandamientos de Dios sin despreciarlo a Él.

Muchos que viven en pecado abierto u oculto parecen creer que no tiene ningún efecto o tiene poco efecto en su relación con Dios. Pero despreciar el mandamiento de Dios significa despreciar a Dios mismo, y no podemos tener comunión con Dios y despreciarlo al mismo tiempo. Si decimos que tenemos comunión con Él y andamos en tinieblas, mentimos y no practicamos la verdad. (1 Juan 1:6)

Cuando Dios habla a David en referencia al pecado con Betzabé dice "La mujer de Urías el heteo" Dios ni siquiera usó el propio nombre de Betsabé. Quería que David considerara a Betsabé no solo como un individuo sino también como la esposa de Urías.

Adversidad contra David.


“Así ha dicho Jehová: He aquí yo haré levantar el mal sobre ti de tu misma casa, y tomaré tus mujeres delante de tus ojos, y las daré a tu prójimo, el cual yacerá con tus mujeres a la vista del sol. Porque tú lo hiciste en secreto; mas yo haré esto delante de todo Israel y a pleno sol.'” (2 Samuel 12:11-12)

La expresión "haré levantar el mal sobre ti de tu misma casa" La Biblia Viviente traduce este mal como adversidad, como “rebelión”. Dios le advirtió a David que debido a que perturbó la casa de otro hombre, Dios permitiría que la angustia viniera sobre la casa de David, desde dentro de su propia casa.

Dios también dijo: "tomaré tus mujeres delante de tus ojos, y las daré a tu prójimo" Así como David violó a la esposa de otro hombre, así otro violará a sus esposas. Esto se cumplió en 2 Samuel 16:21-22 cuando Absalón abusó de las concubinas de su padre en el techo de la casa: y quizás en la misma terraza desde donde David primero miró, amó y codició a Betsabé; todos en algún momento de nuestra vida vamos a cosechar lo que hemos sembrado y no podemos culpar a Dios por el producto de nuestras transgresiones. (Puedes leer tambien David, un joven conforme al corazón de Dios)

En estos juicios, David cosechará lo que ha sembrado , con interés "Porque tú lo hiciste en secreto; mas yo haré esto delante de todo Israel y a pleno sol.'”

El arrepentimiento de David.


2 Samuel 12:13  "Entonces dijo David a Natán: Pequé contra Jehová." La confesión de David es un buen ejemplo. Echó la culpa directamente sobre sus propios hombros. No minimizó su ofensiva. David se dio cuenta de que había pecado especialmente contra Dios.

En el hebreo original, la declaración de David se reduce a solo dos palabras: hata al-Yahweh . Estas dos palabras, y el corazón que reflejan, muestran la diferencia fundamental entre David y Saúl. La confesión no necesita ser larga para ser real y sincera. “Los mayores dolores no siempre son los más verbales" Saúl confesó su pecado en mayor medida, pero con menos eficacia, porque no fue sincero.

Las palabras de David son muy pocas, pero esa es una buena señal de un espíritu completamente quebrantado. No hay excusa, ni escondite, ni encubrimiento del pecado. No se buscan escapatorias, no se invocan pretextos, no se alegan debilidades humanas. David reconoció su culpabilidad abiertamente, con franqueza y sin negar la verdad.

Esta fue una respuesta excepcionalmente buena de un hombre de la posición de vida de David. Cuando se enfrentan al pecado, los reyes a menudo dicen: "Que les corten la cabeza", David mostró que Dios estaba trabajando en su corazón todo el tiempo, y la confrontación de Natán fue solo la última parte de ese trabajo.

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En todo esto David fue revelado como un hombre conforme al corazón de Dios. Otros hombres que habían sido culpables de tal fracaso podrían haber defendido sus acciones, podrían haber matado al profeta. No es así con este hombre. Él conocía a Dios, y sabía lo malo de su acción, y confesó su pecado.

Algo importante que debemos notar en la confesión de David es que habló de sí mismo . No es “nosotros” aunque era cierto que él no era el único pecador. Sin embargo, David sabía que tenía que lidiar con su pecado. David mostró responsabilidad personal por su pecado, sabia que era quien quien debía dar cuenta por sus actos.

Otro punto importante de mencionar es que David no usó un vocabulario elaborado o suave. El pecó . No fue un error, un desorden , una indiscreción o un problema, lo llamo por su propio nombre PECADO.

David en este pasaje también dice: "Contra Jehová" Esto expresó la enormidad del pecado de David. Fueron grandes sus pecados contra Betsabé, contra Urías, contra Ahitofel, contra sus mujeres e hijos, y contra la nación entera, pero su pecado contra el SEÑOR fue el mayor de todos. No hay pecados pequeños contra un gran Dios, y los pecados grandes son aún mayores.

Después de la meditación, David expresó más elocuentemente su arrepentimiento en el Salmo 51 .
"Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones.  Lávame más y más de mi maldad, Y límpiame de mi pecado. Porque yo reconozco mis rebeliones, Y mi pecado está siempre delante de mí.  Contra ti, contra ti solo he pecado, Y he hecho lo malo delante de tus ojos; Para que seas reconocido justo en tu palabra, Y tenido por puro en tu juicio.." 
"Porque no quieres sacrificio, que yo lo daría; No quieres holocausto. Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios" (Salmo 51:1-4; 16-17)

La conciencia de David del pecado, el deseo de limpieza, el reconocimiento del justo juicio de Dios y la comprensión de lo que Dios quiere están claros en el Salmo 51 .

El perdón y las consecuencias inmediatas del pecado de David.


2 Samuel 12: 13-14 "Y Natán dijo a David: También Jehová ha remitido tu pecado; no morirás. Mas por cuanto con este asunto hiciste blasfemar a los enemigos de Jehová, el hijo que te ha nacido ciertamente morirá.

El perdón de Dios fue inmediato, Dios no exigió un tiempo de prueba. Ese "No morirás" significaba que David se libraría del castigo por adulterio ordenado por la Ley de Moisés.

David había creído a la palabra del profeta cuando le dijo“ ¡Tú eres el hombre! " Por lo tanto, él también podía creer la palabra “ Jehová ha remitido (perdonado) tu pecado; no morirás”

Pero el pecado de David había dado lugar a los enemigos de Dios "Hiciste blasfemar a los enemigos de Jehová" David hizo esto al hacer exactamente lo que esos enemigos de Jehová harían en la misma situación. Lo que hizo David no fue inusual entre los reyes y gobernantes del mundo, pero debería ser inusual entre el pueblo de Dios, David era diferente y se esperaba que sus actos no fueran iguales a los de los demás, no somos como el mundo, nuestros actos deben de ir conforme a los preceptos de nuestro Dios.

Ciertamente Dios perdonó el pecado de David, pero no lo protegería de todas las consecuencias del pecado. David tuvo que afrontar las consecuencias de su pecado, comenzando por la muerte del niño que le dio a luz Betsabé.

Esto muestra que Dios no solo quería sanar a David de la culpa de su pecado; También quería sanar a David de la presencia de este pecado. Nunca leemos que David cometiera adulterio nuevamente porque Dios usó estos castigos para alejar tales impurezas de David.

“Mucho antes de su pecado con Betsabé, hubo varios indicios en cuanto a la especial propensión de David a la tentación. Ese pecado sólo echó a la superficie el mal que siempre estuvo dentro de él; y ahora Dios, haciéndole ver que el cáncer mortal está allí, comienza a usar el cuchillo para sacárselo.” (Spurgeon)

La muerte del hijo de David.


 "Jehová hirió al niño que la mujer de Urías había dado a David, y enfermó gravemente. Entonces David rogó a Dios por el niño; y ayunó David, y entró, y pasó la noche acostado en tierra. Y se levantaron los ancianos de su casa, y fueron a él para hacerlo levantar de la tierra; mas él no quiso, ni comió con ellos pan. Y al séptimo día murió el niño; y temían los siervos de David hacerle saber que el niño había muerto, diciendo entre sí: Cuando el niño aún vivía, le hablábamos, y no quería oír nuestra voz; ¿Cuánto más se afligirá si le decimos que el niño ha muerto? Mas David, viendo a sus siervos hablar entre sí, entendió que el niño había muerto; por lo que dijo David a sus siervos: ¿Ha muerto el niño? Y ellos respondieron: Ha muerto”. 2 Samuel 12:15-19

La palabras "Jehová hirió al niño" muchas veces son difíciles de aceptar para algunos. Tristemente, a menudo el inocente sufre a causa del pecado del culpable. Dado que la enfermedad vino inmediatamente después de las palabras del profeta Natán, fue recibida como de la mano de Dios.

La muerte del niño fue mucho más trágica para David y Betsabé que para el niño mismo. Su pequeño hijo sufrió durante varios días y podemos confiar en que el consuelo de Dios se extendió al niño en medio del sufrimiento. Al final de su sufrimiento, el niño pasó a la gloria eterna. Aunque el niño murió, el castigo fue realmente sobre David y Betsabé y no sobre el niño. (Puedes leer mas en nuestro articulo ¿Cuál es el destino de los niños al morir?)

“La misericordia de Dios hacia sus hijos descarriados y arrepentidos se mostrará al convertir los resultados de su pecado en el fuego de su purificación”. (Meyer). Esto ilustra un principio importante: incluso cuando se perdona el pecado, se debe pagar un precio. Dios no simplemente pasa por alto o excusa nuestro pecado. Se perdona y se paga un precio. A menudo , una parte inocente paga el precio del perdón.

Es asombrosa la expresión "Que la mujer de Urías había dado a David" Aunque Urías estaba muerto, y David estaba legalmente casado con Betsabé, el escritor bíblico aún se refiere a Betsabé como la esposa de Urías. Esto se debe a que cuando el niño fue concebido, Urías estaba vivo y Betsabé era la esposa de Urías. Es la forma en que Dios dice: "La muerte de Urías y el posterior matrimonio no hacen que todo esté bien". Muchas veces creemos que podemos fallar a Dios y arreglar todo a nuestra manera, ocultar la falta no hace que el pecado desaparezca.

David rogó a Dios por el niño, tuvo razón al tomar el anuncio del juicio de Dios como una invitación para buscar fervientemente su misericordia. Cuando el juicio de Dios es anunciado o presente, no debemos recibirlo pasiva o fatalistamente. Debemos clamar a Dios en arrepentimiento y pedir Su gracia y misericordia.

David incluso ayunó buscando a Dios, pero el niño murió; esto muestra que la oración y el ayuno extraordinarios no cambian la mente de Dios cuando ha emitido un juicio. David no “obligó” a Dios a cambiar Su plan, no se enojó por el juicio de Dios, recibió su castigo y alabó al Señor. Esto muestra que la oración y el ayuno de David fueron respondidos. David tuvo una sensación de paz cuando el niño murió, sabiendo que hizo todo lo posible para buscar la misericordia de Dios en un momento de castigo

Esta experiencia de David nos nos enseña que la oración y el ayuno no son herramientas para obtener lo que queremos de Dios. Son demostraciones de sumisión radical y entrega al poder y la voluntad de Dios. La capacidad de adorar y honrar a Dios en un momento de prueba o crisis es una maravillosa demostración de confianza espiritual.

Luego de buscar el rostro de Dios en oración y ayuno, el corazón de David estaba lleno de paz y confiaba en encontraría a su hijo en el cielo "Yo voy a él, mas él no volverá a mí."

DIOS EXTIENDE SU MISERICORDIA A DAVID Y  BETSABÉ


"Y consoló David a Betsabé su mujer, y llegándose a ella durmió con ella; y ella le dio a luz un hijo, y llamó su nombre Salomón, al cual amó Jehová, y envió un mensaje por medio de Natán profeta; así llamó su nombre Jedidías, a causa de Jehová" 2 Samuel 12:24-25

Esta es la primera vez que el escritor bíblico llama a esta mujer Betsabé y no la esposa de Urías . Sólo ahora, después del castigo por el pecado, el la llama a Betsabé su esposa, excepto por el mero reporte de su nombre en 2 Samuel 11:3 .

Dios no ordenó que David abandonara o dejara a Betsabé, aunque su matrimonio con ella originalmente era pecaminoso. Debía honrar a Dios en el compromiso matrimonial que hizo, aunque comenzó en el pecado. Pablo ordena el mismo principio en 1 Corintios 7:17

El verso 25 de este capitulo vemos el perdón, la ternura y la misericordia que Dios muestra a David, no le guardó rencor a David y Betsabé. Los días de bendición y fecundidad no habían terminado para David.

Al hijo que le nació a David llamó su nombre Salomón, sorprendentemente, es este hijo , el hijo nacido de un matrimonio que comenzó en adulterio, el que será el heredero del trono de David. Dios escogió a este hijo entre los muchos hijos de David para ser heredero al trono y antepasado del Mesías para demostrar la verdad de que Dios perdona a los pecadores arrepentidos. el nombre de Salomón (Jedidías) curiosamente significa "Amado del Señor", Dios amó a ese niño de la misma forma en que amaba a David, y esa es la muestra del perfecto perdón de Dios, no hay rencor, no hay reproche, no hay señalamientos, Dios no cambió con David, le amó de la misma forma en que lo hizo desde el principio.

La gente puede no perdonar; por esa razón podemos negarnos a creer realmente que somos perdonados. Pero Dios si perdona a los pecadores arrepentidos.

LA VICTORIA DE DAVID EN RABÁ (2 SAMUEL 12:26-31)


Joab pelea contra Rabá.


Cuando Joab peleó contra Rabá y tomó la ciudad real envió mensajeros a David, diciendo: “Yo he puesto sitio a Rabá, y he tomado la ciudad de las aguas. Reúne, pues, ahora al pueblo que queda, y acampa contra la ciudad y tómala, no sea que tome yo la ciudad y sea llamada de mi nombre."

Esto continuó la guerra que comenzó en 2 Samuel 10 Joab estaba a punto de completar la derrota de los amonitas. incitó a David a regresar a la batalla.
Es importante mencionar que Joab luchó durante más de un año para conquistar Rabá, y la victoria solo llegó cuando David hizo las cosas bien con Dios. Había una razón espiritual invisible detrás de la falta de victoria en Rabá. “El pecado de David en casa había impedido el buen éxito de Joab en el exterior, y retrasado la conquista de esta ciudad Rabá, que ahora está lista para ser tomada, para que David reconciliado con Dios pueda tener el honor de ella”.

David captura la ciudad, toma el botín y pone a la gente a trabajos forzados.


"Juntando David a todo el pueblo, fue contra Rabá, y combatió contra ella, y la tomó" Esta fue la fase final de la restauración de David. Volvió a hacer lo que debería haber hecho todo el tiempo "llevar a Israel a la batalla, en lugar de permanecer en Jerusalén."

David estaba en victoria una vez más. Su pecado no lo condenó a una vida de fracaso y derrota. Hubo castigo por el pecado de David, pero eso no significó que su vida estaba arruinada.

David tomó la corona del rey y fue puesta sobre su cabeza, el pecado de David no le quitó la corona. Si David hubiera rechazado la voz del profeta Natán, podría haberlo hecho. Debido a que David respondió con confesión y arrepentimiento, todavía había una corona para la cabeza de David .

Todo este capitulo que hemos estudiado debería poner en guardia a los que no han caído, y salvar de la desesperación a los que sí lo han hecho, tenemos a un Dios que es celoso pero que también es grande en misericordia. 

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